Internet: amenazado por el olvido
«La información digital –la evidencia del mundo en que vivimos– es más frágil que los fragmentos de papiros que se encontraron enterrados junto con los faraones», así es como describe un reconocido especialista en preservación digital la precaria situación del acervo de información surgido de las redes y los medios electrónicos: el olvido amenaza nuestra época más que ninguna otra.
"Los objetos digitales pueden ser textos, bases de datos, imágenes fijas o en movimiento, grabaciones sonoras, material gráfico, programas informáticos o páginas Web, entre otros muchos formatos posibles dentro de un vasto repertorio de diversidad creciente. A menudo son efímeros, y su conservación requiere un trabajo específico en este sentido en los procesos de producción, mantenimiento y gestión", asi dice la "Carta para La Preservación Del Patrimonio Digital" de la UNESCO, que pone de manifiesto que tan lejos llega la preocupación que existe sobre el problema.
Tecnologías "arcaicas"
Una manera sencilla de tomar conciencia de la dimensión del problema es analizar la durabilidad de los soportes materiales donde queda almacenada la información: Las tablillas de arcilla utilizadas por los sumerios sobrevivieron 5000 años, y nada hace pensar que no puedan sobrevivir otros 5000 más. Los papiros, aunque frágiles, nos llegan desde el antiguo Egipto. Los pergaminos –hechos de cuero– también duraron milenios. Luego de la invención de la imprenta, el desarrollo de tipos de papel cada vez mas económicos fue inversamente proporcional a su durabilidad. El papel de lino o algodón podía sobrevivir siglos, el de celulosa en cambio, utilizado masivamente durante el siglo pasado, es tan inestable que probablemente se vuelva polvo al cabo de una centuria.
¿Y cuanto permanece la información almacenada sobre los sustratos magnéticos y ópticos de los medios electrónicos? Lamentablemente, los plazos, en el mejor de los casos, se han reducido a décadas. Esta es la situación crítica sobre la cual los expertos alertan: la información digital no ha sido pensada para su permanencia en el tiempo y debemos pensar en políticas activas de preservación.
Guardando la WWW, más concentrado, más fácil de borrar
El almacenamiento digital sin embargo, tiene ciertas ventajas con respecto a otras tecnologías, la posibilidad de hacer infinitas copias exactas, algo imposible en el mundo analógico. Pero esta característica no parece demasiado aprovechada cuando vemos que los grandes sitios que funcionan como los principales repositorios de información de la red, están monopolizados por pocas empresas y servidores, y esto constituye un problema: en 2009, por ejemplo, tras una larga decadencia, cerró "Geocities", el servicio para alojar gratuitamente sitios web. El caso puso en evidencia la fugacidad del almacenamiento de contenidos en internet: de la noche a la mañana se borraron millones de webs. La mayoría de los servicios surgidos en la llamada web social, no asumen ninguna responsabilidad relacionada con la preservación de los contenidos aportados por los usuarios. ¿Cuánto durarán los Flickr o Youtube de nuestros días?
Tambien las acciones generadas por gobiernos u ONGs, destinadas a atender el problema de la digitalización y preservación del conocimiento, desaprovechan los potenciales beneficios de la redundancia de copias que ofrece la plataforma digital. Al tratarse de grandes proyectos centralizados que requieren costos millonarios de mantenimiento ¿Qué hacer cuando se acaban los fondos? ¿Cómo darles sostenibilidad en el tiempo? si peligran los presupuestos, peligran los videos, films, libros, programas de televisión o fotografías que se hayan guardado en formato digital. Algo así ocurrio con la "Bibliography of the History of Art", una base de datos bibliografico sobre la historia del arte, proyecto creado en gran medida con fondos públicos, y sostenido por la fundacion Getty, que ante problemas economicos vio peligrar su futuro.
A diferencia de las bibliotecas o museos, donde lo material, aunque permanezca mal conservado en periodos de crisis, "sigue estando" en algún lugar fisico, las bases de datos del ambito digital, a veces ubicadas en servidores subcontratados en lugares lejanos del mundo, pueden desaparecer completamente de la noche a la mañana si se acaba el dinero para el mantenimiento.
Las redes P2P por el contrario, son ejemplos de redundancia de información replicada en múltiples computadoras, que aprovechan como nadie esta ventaja del medio digital de producir infinitas copias perfectas de una obra, y asegurar la supervivencia de un archivo musical, libro o film. Casi como emergentes azarosos en la red, muchas comunidades de usuarios terminan cubriendo el espacio que organizaciones con muchos recursos no consiguen, dando una perspectiva de permanencia y acceso inédito.
Estándares y obsolescencia planificada
Hay que sumar a la efímera vida de los soportes, ciertas estrategias comerciales originadas en el vértigo de la innovación que agravan el problema. La agenda de la industria esta marcada por el negocio: una computadora no "debe" durar más de 3 o 5 años, por lo cual los usuarios serán vehementemente inducidos a actualizar equipo y en el camino dejar olvidada información en dispositivos deliberadamente obsoletos (pensemos en los "antiguos" disquettes de 5.25'). Es muy probable que algunos sustratos mas durables como el CD, superen la permanencia de los dispositivos que permiten su lectura: aunque dispongamos de numerosos CD bien conservados, de nada sirve si la industria decide convertir las lectoras en una rareza para impulsar algun nuevo soporte. No deberían quedar estos cambios sujetos sólo a una arbitraria estrategia comercial circunstancial, quizá los especialistas en preservación tendrían que ser consultados para poder fijar ciertas pautas mínimas sobre el mercado.
La obsolescencia planificada de software y formatos, es otra estrategia que utilizan las empresas para obligar a actualizaciones a veces innecesarias. El caso de los .doc de Microsoft Word generó uno de los mayores problemas de acceso a documentos "antiguos" atribuidos a la obsolescencia planificada. Todos los años se celebra el "Día Mundial de los Documentos Libres" y uno de los motivos que impulsan esta campaña, es el hecho innegable de que los estándares abiertos aumentan las posibilidades de que un documento pueda ser accedido en el futuro, al hacerse públicas las especificaciones técnicas del formato y romperse el monopolio donde sólo una aplicación de incierta permanencia permite el acceso.
La barrera del Copyright
Un seria amenaza a la preservacion y el acceso, es el marco legal que afecta a las obras a ser preservadas. Los acervos accesibles y abundantes en la red constituyen un peligro para la industria del entretenimiento, no tanto por las supuestas perdidas sostenidas en el falaz argumento de "obra descargada = copia material no vendida" --ya bastante desacreditado en numerosos estudios-- sino por la competencia que representa para la oferta controlada por la industria. Asi es como este año google termino dando de baja numerosos "MP3 blogs" de su servicio blogger debido a denuncias de titulares de derechos. Los sitios publicaban listados de links a colecciones musicales de los estilos mas diversos subidas por los fanaticos a la red. Problemas similares enfrentan los coleccionistas de videojuegos, que tambien encuentran una actitud hostil de las empresas, quienes a pesar de no obtener beneficios no liberan oficialmente obsoletos "abandonaware", ya fuera de toda perspectiva comercial, pera terminar con esteriles complicaciones legales.
Un seria amenaza a la preservación y el acceso, es el marco legal que afecta a las obras a ser preservadas. Hay que tener en cuenta que los problemas legales, aunque parezcan no incidir demasiado sobre la voluntad de los usuarios que igual digitalizan, copian y comparten, privan a muchos proyectos de fondos provenientes de organizaciones que no pueden exponerse al peligro de una demanda, o de los gobiernos que no pueden vulnerar sus propias leyes. Las bibliotecas enfrentan situaciones igualmente absurdas: por ejemplo, la digitalización de libros en peligro de deterioro en muchos países se encuentra en el borde de la ilegalidad. Ni hablar de la posibilidad de dar acceso a colecciones de obras con copyright vigente, aunque estén fuera de la oferta comercial, de igual forma pesa sobre ellas el bloqueo legal.
La libre circulación
Las contenidos libres –como los licenciados bajo "creative commons"– no presentan trabas al acceso, copia y distribución, y promueven la construcción de acervos comunes con mejores posibilidades de preservación, que pueden apoyarse en la flexibilidad de comunidades colaborativas, y a la vez recibir apoyo de estados y organizaciones formales sin exponerse a riesgos legales, ni criminalización de sus usuarios. Wikipedia y sus proyectos satélites, que atesoran abundante contenido libre son un ejemplo auspicioso. En este contexto de obras libres, las redes P2P no quedan estigmatizadas por la clandestinidad, y pueden ser mejor valoradas como herramientas al servicio del bien común, aprovechando su capacidad de generar repositorios distribuidos y resilentes del patrimonio cultural que esté en formato digital. A su vez, los estándares abiertos y la infraestructuras construidas sobre software libre, eliminan barreras y facilitan la replicación de proyectos y repositorios. Todo en la red parece efímero y fugaz, sin embargo emergen desde su propia dinámica soluciones innovadoras –que si no conspiramos en deteriorar con marcos legales hostiles– pueden ofrecer oportunidades de preservación y acceso sostenibles, que se complementen con los proyectos especializados de museos e instituciones públicas dedicadas a esos fines.
La máquina del tiempo de Internet
Internet Archive es una organización sin fines de lucro creada en 1996, cuyo objetivo es preservar los sitios de Internet tal como se encuentran en cada momento, así como hospedar contenidos multimedia libres o en dominio público. Tiene una enorme colección de videos, libros y audios. La sección más popular sin dudas es "Wayback Machine" una verdadera "maquina del tiempo de Internet", que realiza periódicamente una "captura" de una parte significativa de la red, lo que permite consultar como se veía determinado sitio en cualquier momento, aunque ya haya desaparecido. Para utilizar este servicio solo se debe ir a http://www.archive.org/ e introducir la dirección del sitio deseado en el campo de texto de "Wayback Machine". A continuación se nos ofrecerá un historial de fechas del sitio consultado.
Museos involuntarios de videojuegos
Un caso paradigmático de preservación realizado por una comunidad de usuarios, son los emuladores de juegos "arcade", donde se salvó del olvido a toda una época dorada del videojuego: aquellas viejas máquinas que se encontraban en salones de entretenimiento. Programadores de todo el mundo desarrollaron emuladores del viejo hardware en proyectos colaborativos de software libre, mientras otros fanáticos se encargaron de catalogar y hacer disponibles las memorias ROM de los juegos, e incluso digitalizar las gráficas de los muebles. Todo un acervo preservado dentro de una dinámica de sostenibilidad distribuida por la red. Para más información visita la página del emulador más conocido "MAME" http://mamedev.org/ disponible para numerosas plataformas.
(hasta aca 8400 carcteres)
Registro de una época
Seguramente será demasiado tarde cuando la perspectiva del tiempo nos revele que e-mails, imágenes o documentos de un momento histórico trascendente, quedaron perdidos en el descuido del presente y la incapacidad de los medios digitales para preservarlos: el viejo cajón lleno de cartas inéditas recuperadas de un algún personaje reconocido luego de algunas décadas ¿se encontrará en las efímeras cuentas de e-mail o en los efímeros servicios online? Atendiendo un vacío semejante, la British Library tuvo la iniciativa de establecer un programa voluntario que alienta a los usuarios de la red a reenviar copias de sus correos electrónicos para que queden preservados en un archivo histórico, una suerte de "instantánea" del presente para ayudar a los historiadores del futuro a comprender nuestra época.
La esperanza brasileña
El gobierno brasileño se encuentra impulsando políticas bastante avanzadas para hacer frente al problema de la digitalización, acceso, y preservación de sus acervos culturales. Cuenta con un proyecto ambicioso de digitalización, "Brasiliana", que da acceso a una extraordinaria colección de libros, folletos, periódicos, manuscritos, mapas e imágenes sobre la historia y cultura de Brasil, reunida por la Universidad de San Pablo. Una característica del proceso brasileño son los debates que se dan, auspiciados por el propio Ministerio de Cultura, específicamente sobre las trabas que la legislación sobre copyright pone a la posibilidad de acceso y conservación de dichos acervos. Muchos especialistas coinciden en que ése es el principal desafío a superar, y se proponen modificaciones a las leyes realmente comprometidas con el acceso a la cultura para la ciudadanía en su más amplio espectro.
Derecho al olvido digital
Mientras nos preguntamos en este artículo como no perder la información almacenada en las redes, surge un problema inverso: las personas que hacen un uso intensivo de internet y redes sociales, y ahora reclaman su derecho a que desaparezca información sobre su vida privada. Es el caso de Francia que actualmente impulsa un proyecto en ese sentido. Son numerosos los casos de individuos que han quedado estigmatizados luego de publicar en su blog o red social, cierta información personal, anécdotas u opiniones que en el contexto equivocado pueden resultar muy dañinos. Por ejemplo, cuando son leídas en las oficinas de selección de personal, que se toman el trabajo de "googlear" los nombres de los aspirantes a un puesto, y logran averiguar algunos datos extra de su vida personal que les dan indicio de su perfil, aptitudes etc.